Sociedad civil colombiana en New York presenta retos y oportunidades para la paz

Octubre 12 de 2022

En el marco de la gira de incidencia, en New York del 10 al 12 de octubre de 2022, la Corporación Jurídica Libertad – CJL, ONG que hace parte de la Coordinación Colombia Europa Estados Unidos y PROCLADE Internacional, han sido recibidos por la Misión de Colombia ante la ONU, así como por varias Misiones del Consejo de Seguridad; además por oficiales de la ONU y representantes de la sociedad civil en NY, para hablar sobre la implementación del Acuerdo de Paz, los retos y oportunidades que trae el nuevo contexto político del país y el papel de la organizaciones sociales.

En cada reunión la delegación colombiana ha hablado sobre la actual crisis humanitaria y de derechos humanos por la que atraviesan muchas de las regiones de Colombia, así como la falta de garantías para la labor de los lideres y lideresas y para resguardar la vida de las y los excombatientes de las FARC, todo esto a causa del incumplimiento en la implementación integral del Acuerdo de Paz por parte del anterior gobierno nacional. Esta realidad que sigue afectando principalmente a las comunidades étnicas y campesinas, difiere de la mirada de algunos sectores de la Comunidad Internacional, que consideran a Colombia una experiencia exitosa de paz a nivel mundial.

Las organizaciones reconocen que hay un nuevo contexto con el gobierno de Gustavo Petro el cual abre la posibilidad de retomar el camino hacia la construcción de la paz integral y territorial, y reiteran que es necesario: 1) fortalecer la implementación total del Acuerdo de Paz, 2) reconocer y retomar las agendas humanitarias de las regiones y que hayan diálogos humanitarios vinculantes, 3) avanzar en la negociación con el ELN con una amplia participación de la sociedad civil así como desde los territorios y 4) lograr el sometimiento del paramilitarismo y otras estructuras armadas, asegurando los derechos de las víctimas.

Destacaron las reciente medidas adoptadas por el gobierno entre ellas convocar a la CSIVI,  la reinstalación de la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad, la cual debe coordinarse con la estrategia de la paz total para logar el efectivo desmonte de las estructuras armadas que cometen agresiones contra las comunidades; el Plan de Emergencia el cual busca frenar la ola de violencia contra quienes defienden los derechos y las y los excombatientes desde una territorialización de las acciones institucionales; las recientes conversaciones que se abren para llevar a cabo la reforma a la política de seguridad y defensa y la adopción del Acuerdo de Escazú, entre otras.

Para la CJL y la PROCLADE un aspecto clave que hay en el país es el tema de la justicia y la lucha contra la impunidad, por ello reconocen la importancia de la Jurisdicción Especial para la Paz – JEP, pero expresan que este mecanismo de justicia transicional debe avanzar aún más en lo que respecta a la criminalidad estatal, ya que las Ejecuciones Extrajudiciales, no han sido el único crímen perpetrado por agentes estatales. Así mismo advierten que la Fiscalía General de la Nación, en cabeza de Francisco Barbosa, ha sido un órgano que ha contribuido a la impunidad, ya que en graves crímenes donde hay responsabilidad de agentes estatales no se conoce de avances en las investigaciones y sanciones a los responsables, tal es el caso de las víctimas de la violencia policial en el marco de las protestas sociales, y los asesinatos de personas defensoras de derechos humanos. En los casos donde hay condenas respecto al tema de agresiones contra líderes y lideresas, estas se quedan solo en autores materiales.

Para la las organizaciones de Colombia es importante que en este contexto de retos y oportunidades el Consejo de Seguridad renueve y amplie el mandato de la Misión de Verificación de manera que pueda continuar con su labor y que acompañe los diálogos con los grupos armados ilegales que han respondido a la invitación del gobierno nacional.

Además, Naciones Unidad debe fortalecer el papel de la OACNUDH para que a través de su mandato continúen contribuyendo al logro de la paz y la garantía de los derechos humanos.

Esperamos que se sigan abriendo espacios para que la sociedad civil continúe con su labor de incidencia y aportes a la construcción de la paz.