Una descomunal multitud se aglomeraba en la sala de sesiones del Concejo de Medellín. Las sillas, el pasillo, las escalas, estaban a reventar. En la plazoleta del Centro Administrativo La Alpujarra esperaban los desafortunados que no lograron entrar al edificio antes de que se diera la orden de impedir más ingresos.
Pancartas y pendones colgaban de las paredes del recinto exigiendo que las víctimas, los desplazados, los desconectados, las mujeres, los niños, fueran incluidos en el Plan de Desarrollo Municipal 2012-2015, “Medellín, un hogar para la vida”, que se sometería a aprobación en la jornada de hoy.
Pese a la inconformidad que se respiraba, parecía que la sesión se desarrollaría sin mayores percances. No obstante, a mitad de la mañana un grupo de personas interrumpió la actividad y comenzó a leer a viva voz: “Estamos inconformes con el Plan de Desarrollo Municipal, nuestras propuestas no quedaron incluidas en lo fundamental del Plan, y el ejercicio participativo parece ser más bien demagogia que democracia. Con la participación legitimaron el proceso debido a los encuentros y debates tan numerosos donde fuimos los que conv0ocamos, pero sólo resultamos siendo cifras, no hubo una real inclusión”.
Durante años la iniciativa de las comunidades las ha llevado a trazar sus propios planes de desarrollo local y corregimental, donde han recogido sus necesidades y anhelos. Algunos de ellos fueron inscritos como anexos en el programa de gobierno del actual alcalde Aníbal Gaviria. Sin embargo, sus propuestas no fueron incluidas en el Plan de Desarrollo Municipal ad portas de aprobarse.
Por esta razón, afirmaban, “decidimos movilizarnos hoy 30 de mayo, cuando el Concejo está aprobando el PDM 2012-2015, ya que si ellos no nos escuchan, las comunidades seguiremos defendiendo nuestras propuestas, que son las rutas de gestión para la solución de las necesidades de la población y la superación de la inequidad”.
Proponen, dada la situación, la creación de la una Mesa de Diálogo y Concertación con la participación de las comunidades y la Administración Municipal, donde se estudien y proyecten programas, pero también se decida la distribución de los recursos de acuerdo a las prioritarias necesidades de las comunidades y de la ciudad, y no “al amaño de firmas constructoras o tecnócratas que no conocen nuestro territorio y hacen sus planes desde los escritorios”, como declaran los manifestantes en el comunicado que distribuyeron durante la mañana.
Empero los reclamos y quejas de gran parte de las personas que se encontraban en el recinto del Concejo, los concejales decidieron hacer un receso de media hora mientras pasaba lo que ellos consideraron una simple molestia. Algunos continuaron ocupando sus lugares haciendo caso omiso al anuncio que hacía muchos otros mientras abandonaban las instalaciones: “aquí ya decidieron. Si la Administración decide en el Concejo, las comunidades decidimos en nuestros territorios”.