Efren Taborda es un líder social de la Comuna 8, pertenece y ha trabajado en la mesa de víctimas a nivel departamental de Antioquia de la sociedad civil, en mesas temáticas de vivienda, servicios públicos en la 8. Conversamos él acerca de lo que piensa sobre el territorio y por qué defenderlo.
¿Para usted qué es el territorio?
Para nosotros en la comuna 8 el territorio es un entramado que corresponde al hábitat del ser humano, de la vivienda, el medio ambiente y del espacio de diferentes formas de vida económicas.
Desde ese entramado consideramos nosotros que es valioso, se ha tenido en cuenta por parte del gobierno local cuando se va a tratar de hacer cambios o transformaciones en el mismo y por ello venimos 10 años para acá trabajando propuestas en torno al territorio.
¿Por qué defender ese territorio?
El territorio es importante defenderlo porque históricamente la gobernabilidad siempre ha planeado el territorio a su querer y a mano institucional, empresarial, donde nosotros hemos quedado como en un segundo plano. Entonces nosotros hemos considerado que la participación de las comunidades en la planeación del territorio es muy importante, máxime cuando consideramos que hay deuda histórica del gobierno con la población, entre ellos muchas víctimas del desplazamiento forzado por el conflicto armado y son muchas las comunidades que tenemos de diferentes regiones del país, al interior de la comunidad de que se pueden aproximar a 6.000 familias en total y en donde hay aproximadamente alrededor de 14 asentamientos de estas poblaciones que no podemos permitir que vuelvan a ser revictimizadas con las actuales políticas públicas.
Entonces lo que estamos tratando es que haya un diálogo, haya unos acuerdos y en cuanto a lo que se vaya a considerar que es una transformación territorial para que así haya realmente una ciudad equitativa para todos y no la ciudad que está imponiendo condiciones sobre otros sectores de la población.
¿Precisamente por esa importancia que tiene la Defensa del Territorio, esa deuda histórica de la que se habla, por qué hacer Memoria Histórica alrededor de la defensa del territorio?
Si, digamos que desde las comunas de Medellín, desde los corregimientos hemos estado atravesados por un conflicto armado hace muchas décadas y desde esas décadas de conflicto pues su mayor parte de cuota de sangre la puesto la población más vulnerable. De allí que nosotros estamos tratando de rescatar de que la participación no se limite únicamente a una participación representativa sino que sea una participación colectiva, una representación democrática donde las juntas de acción comunales, las corporaciones, los grupos juveniles, adulto mayor, mesas de víctimas y de vivienda pues puedan también desde esa memoria reclamar una serie de derechos que nos han querido totalmente invisibilizado como es el tema de un bienestar y calidad de vida en el territorio, a una garantía de defensa de los derechos humanos y a un buen vivir para los niños, los adultos mayores, ante la falta de recursos económicos, el desempleo y muchas circunstancias por las que tiene que atravesar las comunidades y que el gobierno en ningún momento a pesar de saber de esa deuda histórica que tiene con la población, la ha querido asumir, entonces estamos tratando de que esa memoria de pérdida de tierras, pérdida de vidas o de composición de los núcleos familiares, financiar una verdadera política pública donde se den todas esas garantías para volver a recuperar el buen vivir desde el núcleo familiar y desde el reconocimiento del ser como sujeto político con su propuesta, con sus proyectos, con sus programas y que entremos así a romper esa inequidad que hemos estado sufriendo históricamente.
¿Cuénteme cómo es el proceso que ustedes llevan de la mesa de vivienda de la comuna 8?
Yo inicialmente fui miembro de Asocomunal Medellín, estamos hablando de la década de los 90, 98, como miembro de Asocomunal Medellín me tocó inicialmente tratar de incidir para que las juntas de acciones comunales tuviéramos una mayor incidencia en los territorios de las comunas, lo cual ha sido muy difícil ya que el movimiento comunal ha estado muy cooptado por la politiquería o por una cantidad de problemas de intereses particulares o de pequeños grupos, lo cual hace toda una incidencia real para la comunidad.
Entonces en el 98 llegué a la Corporación Volver, que es una corporación de víctimas y la Corporación Volver también empezó a formar otras organizaciones como son la Mesa Interbarrial de Desconectados a nivel de ciudad y allí la creación en la comuna 8 de la mesa de vivienda y servicios públicos y el fortalecimiento de la mesa de víctimas, estas organizaciones de la comuna.
Ha sido un trabajo muy importante en el sentido de nosotros demostrarle a todas esas organizaciones que están cooptadas por la institucionalidad de que es necesario trabajar desde la autonomía en la comunidad que viene elaborando propuestas desde la caminada al territorio, haciendo asambleas barriales, las salidas de comunas, cabildos, consultas populares, entonces ha sido una experiencia muy valiosa que se ha venido ganando durante estos últimos 8, 10 años en el territorio y que ese asunto desde el punto de vista organizativo hemos ganado también un respeto ante la Asocomunal de las comunas y ante las juntas administradoras locales, las cuales han tenido que reconocer que el trabajo de nosotros en los territorios ha sido un trabajo ejemplar, donde quizá ellos ven y reconocen sus propias deficiencias en ese estilo de trabajo que tenemos nosotros, que es el estar consultando permanentemente a la comunidad, discutiendo, debatiendo y buscando propuestas entre todos para tomar decisiones en el territorio.
¿Esa mesa de vivienda cuál fue el objetivo principal?
En la mesa de vivienda una de las prioridades que hemos considerado nosotros importantes es el de garantizar la sostenibilidad de la comunidad en los territorios, porque son comunidades que vienen como te decía anteriormente víctimas del desplazamiento forzado, víctimas del conflicto armado y no pueden permitir que vuelvan a estar revictimizadas después de 30, 40 años de estar viviendo ya en estos asentamientos, con propuestas de políticas de vivienda vertical o edificios que son totalmente ajenos a su cultura, a su forma de vida, a su hábitat tradicional que es del campo, que es una vida cerca a la tierra, incluso de los alimentos, hemos estado trabajando en lo de las huertas comunitarias con una mirada de soberanía alimentaria, de un alimento sano, una producción limpia, sin químicos, que sean alimentos orgánicos para la alimentación de los niños, de los adultos mayores.
Entonces esta mesa de vivienda realmente ha sido un eje fundamental para la comunidad porque desde ahí se viene aprendiendo que no necesariamente tenemos que estar dependiendo de las decisiones de un concejal, de un alcalde sino que desde nuestra propia autonomía nosotros podemos determinar cuáles son las prioridades de nuestras sociedades y exigirlas como tal, como un derecho y movilizador y desde los derechos humanos, es un espacio que día a día gana más fuerza, máxime si tenemos en cuenta el gobierno viene haciendo negociaciones con los grupos armados como son las AUC como son las guerrillas en Colombia y nosotros decimos: es que tenemos autoridad moral y política más que cualquiera para pedir también negociaciones en los territorios y desde allí venimos con procesos con aquellos líderes que ya han entendido esa necesidad y que pone por encima los intereses de la comunidad, los intereses institucionales o empresariales que llegan a cooptar los líderes al territorio.
Mucho se ha hablado en la ciudad de los megaproyectos, de los proyectos adelantados por la Alcaldía, que son firmados y pactados por la Alcaldía anterior y lo que debe implementar la actual, se ha hablado mucho de Jardín Circunvalar, de la construcción de nuevas líneas de Metro Cable. ¿En qué afecta este tipo de proyectos o de mega proyectos a las comunidades de la comuna 8?
Nosotros hemos venido planteándole a la alcaldía de Medellín que nosotros no estamos en contra del progreso de la ciudad, estamos en contra de las prioridades que ellos determinan. Nosotros cuando estamos hablando de las prioridades es mejorar los ingresos económicos de las familias. El de garantizar salud, educación, una vida sin miedos en el territorio, ellos determinan hacer unas altas inversiones en un jardín circunvalar donde están invirtiendo muchos recursos en un camino por la vía, la ruta de campeones, toda una inversión en cemento, en material gris y no tienen en cuenta la realidad socio económica de nuestras comunidades.
Para colocar un ejemplo de lo que se ha venido viviendo con las comunidades que han sido desplazados, lo que toca de las rutas de Metro cable, hemos tenido muchas quejas de familia que han dado 12, 15, si acaso 20 millones por su vivienda, donde anteriormente vivían dos o tres familias en la misma casa y que por lo menos estaban en un espacio que era de ellos y que con esta plata que les están dando rápidamente en tres o cuatro meses se las van a comer en alimentos, en otros gastos, cubrir necesidades básicas y se van a quedar sin la casa, sin la vivienda.
Nos parece que es una política totalmente injusta y le hemos dicho siempre al alcalde saliente y le estamos diciendo al entrante familia que salga del territorio por motivos de un mega proyecto de la alcaldía, esa familia tiene que quedar igual como estaba o mejor, palabras que nunca han querido recogerme y que han querido engañar a las comunidades.
Hemos intentado plantear una fórmula que nunca han querido recogerme ni han querido escuchar a las comunidades, hemos tratado de plantear una fórmula de solución colectiva, pero obviamente al EDU como a la alcaldía le interesa agarrar la familia individualmente para poderlos chantajear, enredarlos, hacerlos creer que realmente si es un negocio, entregar su espacio, su hogar a cambio de un pequeño recurso económico que no va a servir a futuro. Pero también hemos logrado desde otras comunidades más organizadas a ganar cierta incidencia en los territorios, hacer resistencia mediante propuestas, mediante la movilización y tenemos la satisfacción que algunas familias de la comuna se logró evitar que fueran a ser revictimizadas y vamos a esperar en el futuro cómo nos va con el nuevo gobierno que se viene porque como te decía nosotros estamos con el progreso pero que sea un progreso equitativo, armonioso con los intereses y necesidades de la familia, no beneficiando únicamente los lucros de los grandes constructores y aquellas empresas prestadoras de servicios que solo quieren es recoger sus ganancias sin importarles cómo queden las comunidades en el territorio.
¿Qué pasa con el EDU?
El EDU mediante su programa de trabajo social entre comillas ha venido prometiéndole a algunas familias del territorio que les van a cambiar el ranchito por un apartamento de 40 millones de pesos y es así como inclusive como han venido comprándole el lote a estas familias que van a sacar, lo que tiene es que no ha sido concertado con las comunidades, por ejemplo nosotros tenemos un centro de salud Sol de Oriente, que cuenta con un lote aproximadamente de 150 metros cuadrados, que es donde hemos venido insistiendo para una ampliación de la Unidad Hospitalaria, el centro de salud por una Unidad Hospitalaria que es urgente en el sector, en el territorio.
Y ahorita se están haciendo proyectos de vivienda para ese lote sin concretar con la comunidad interesada del entorno. Nosotros ya les hicimos conocer a ellos que nosotros no estamos interesados en que ese lote se utilice como apartamentos, así se esté diciendo que es para la misma comunidad porque es que nosotros consideramos que la comunidad donde están viviendo están viviendo bien, ellos lo que necesitan es un mejoramiento integral de barrio, un programa como lo dice en CONPES a nivel nacional, que con voluntad política se puede lograr hacer. Pero como ellos siempre andan buscando es su negocio, sus beneficios personales, ya vienen quitándole papelería a muchas familias y diciéndoles que tranquilos que les va a ir mejor y a los que se han resistido los han amenazado que van a quedar sin el apartamento y sin casa que porque les van a echar el ESMAD para que los saquen supuestamente de su vivienda.
A nosotros nos parece muy preocupante esa situación y máxime cuando son sectores donde tenemos juntas de acciones comunales que deberían estar interviniendo con el apoyo de Asocomunal y la junta administradora local pero vemos que realmente las comunidades están solas, totalmente abandonadas y la Mesa de Vivienda y de Servicios Públicos y la Mesa de Víctimas va a tratar al máximo de cubrir en parte este déficit de falta de liderazgo para tratar de que sea lo mejor posible para las comunidades ese reasentamiento y que ese reasentamiento sea en la misma comuna, lo que estamos proponiendo es que sea en tierra, no que sea en el aire. Nosotros hemos sido muy claros en que la tierra para las familias es un patrimonio familiar porque este patrimonio familiar es un aire para los hijos de los hijos y no pretender favorecer los negocios que no queremos, que es cambiar una tierra por aire lo cual es deprimente pues y me parece un chantaje, una obligación, una imposición a la comunidad.