Comunicado de Prensa
El Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado, MOVICE, constata, que las restituciones emprendidas por el actual gobierno, en el marco de la llamada Ley de Víctimas y Restitución de Tierras, no son tal y se fundamentan más en una formalización de tierras que en una auténtica entrega de éstas a quienes fueron despojados por el conflicto político, social y armado del país.
Las víctimas de crímenes estatales nos movilizaremos este 6 de marzo, Día Mundial de las Víctimas de Crímenes de Estado, con autonomía e independiencia, en las ciudades de Montería, Villavicencio y demás regiones, para exigirle al gobierno nacional que le diga la verdad a Colombia y al mundo en materia de restituciones, pues hemos evidenciado que:
-39 millones de hectáreas, de las 114 millones que tiene Colombia, han sido concesionadas a empresas mineras. Esta situación no tendrá retroceso con la Ley de Víctimas, pues las empresas mineras y de agrocombustibles están blindadas por el “derecho a la superficie” y el “contrato de uso”, para futuros pleitos jurídicos, en detrimento lógico a todo proceso de entrega de tierras usurpadas por éstas y el paramilitarismo.
-De las 160 mil restituciones, a realizarse según el Plan Nacional de Desarrollo durante los cuatro años de gobierno, sólo se harán efectivas 11 mil en el 2012. Finalizado el “Plan de Choque”, tan sólo 1.005 hectáreas fueron realmente restituidas, prueba de que en Colombia asistimos a un modelo falseado de restituciones de tierras.
-El país tiene hoy aproximadamente 5 millones de desplazados y, en promedio, 10 millones de hectáreas despojadas durante el conflicto político, social y armado.
-El 0,4 % de los propietarios poseen más del 60 % de los predios, mientras el 57% de la gente tiene menos del 2% de los predios.
Hacemos un llamado a las víctimas en Colombia y exiliadas, a los movimientos sociales y populares, al movimiento estudiantil, a las organizaciones de mujeres, a las comunidades afros, campesinas e indígenas, a movilizarnos el próximo 6 de marzo de 2012, haciendo propia la lucha por la defensa y permanencia en las tierras y los territorios y contra el despojo estatal.